dimecres, 28 de desembre del 2011
Equip de govern de Calafell dona paga de nadal per politiques socials
dissabte, 24 de desembre del 2011
Dos diputados de ICV se niegan a denunciar por el cerco al Parlamento
El primero en declarar fue Salvador Milà, que reconoció a dos de los jóvenes que participaron en la protesta aunque negó que le hubieran agredido. El diputado aseguró que no tiene ninguna reclamación que hacer y que el día del cerco llegó a tiempo a su trabajo parlamentario junto al resto de los miembros de su grupo.
Tras Milà compareció Albert Boada, ex número dos de Interior en el Gobierno de Montilla, que entró en el Parlamento con una pintada roja en la nuca. Boada tampoco cargó contra los indignados, sino contra los mossos, por no garantizar su seguridad. Afirmó que no resultó herido ni su vestimenta dañada, y que tardó dos minutos en quitarse la pintura que le habían rociado.
dimecres, 21 de desembre del 2011
Primeros casos de niños malnutridos en Barcelona
- Cáritas vuelve a repartir alimentos y subvenciona la comida a los escolares sin beca.
- Tres de cada diez atendidos dependen de la beneficiencia.
- Las personas que reciben alimentos están cada vez más desesperadas
Hace unos meses Cáritas ya alertó de que la situación de necesidad social recordaba a la posguerra. Ahora, ya han detectado malnutrición en algunos niños, que no disponen de becas de comedor y que dependen de padres sin recursos. Actualmente, se calcula que tres de cada 10 personas atendidas por esta entidad no reciben ningún tipo de prestación o ayuda, con lo cual viven de la beneficencia, de los alimentos o del dinero en metálico que les da la ONG.
dissabte, 17 de desembre del 2011
Artur Mas marxa per la porta del darrera a Reus
La indignació va creixent i 200 indignats a Reus increpen al Mas que surt per la porta de darrera
dilluns, 12 de desembre del 2011
Artur Mas pagará 10 millones de euros a empresas amigas para despedir a trabajadores de las empresas públicas
“Con los expedientes de regulación de empleo, se están forrando. Los empezó Gisa [la compañía encargada de la obra pública]. Pero en total estamos hablando de 80 empresas públicas”, señaló a El confidencial Xavier Casas, responsable del sector de la Generalitat de la UGT catalana. Este dirigente sindical critica que “se gasta más dinero en asesorías y en bufetes de abogados que en indemnizaciones a los trabajadores. Lo grave es que las empresas ya tienen sus propios gabinetes jurídicos. Pero también tienen los de las consejerías y los centrales de la Generalitat. Y no puede ser que algunos de estos gabinetes tengan un presupuesto de 100.000 euros y sean incapaces de hacer un informe de los recursos de sus respectivas empresas”.
Un informe elaborado por la UGT destaca que “los trabajadores y trabajadoras de estas empresas tienen contratos laborales, sujetos a condiciones equiparables a cualquier trabajador de una empresa privada. Los directivos, en cambio, son personas de confianza política, no siempre cualificados para el trabajo que realizan y que no se someten ni a la exigencia de la empresa privada ni a todos los controles propios de la administración pública. Así, pueden gastar miles de euros para asesorarse legalmente con bufetes particulares sobre cómo despedir a buena parte de su plantilla. Todo esto, a cargo del erario público y sin rendir cuentas”.
La UGT alerta especialmente contra la privatización encubierta de los servicios públicos. “Las decisiones sobre los despidos no se fundamentan en una evaluación sobre el funcionamiento y la calidad del servicio ofertado por la entidad. Responden a un elemento de oportunidad, son trabajadores más fáciles y más baratos de despedir, y a un interés partidista: reducir el sector público para facilitar la entrada de la empresa privada en la gestión de servicios de interés general”. Y subraya que “no se escuchan los criterios técnicos ni se dispone de un modelo alternativo que garantice la máxima eficiencia”. El Confidencial intentó, sin éxito, que la Generalitat comentase o matizase las acusaciones ugetistas.
El sindicato también critica que las cúpulas directivas “responsables de la situación actual” se trasladan a otros organismos. “Recordemos las palabras del consejero de Territorio y Sostenibilidad, Lluís Recoder: ‘Si la ACA [Agencia Catalana del Agua] fuese una empresa privada, se tendrán que pedir responsabilidades a sus gestores’. Curiosa manera de pedir responsabilidades, ya que de los tres gerentes del ACA, uno es el actual presidente de Gisa, otro es el secretario general de Justicia y el último, director de servicios de Justicia (actualmente cesado)”, dice el texto.
Los despachos beneficiados
Pero no se queda ahí la cosa. El sindicato denuncia algunos de los bufetes que han presentado abultadas minutas para asesorar sobre los expedientes de regulación. Entre ellos, cabe destacar la firma Vilardell Assessors. Esta compañía cobró 50.000 euros para despedir a 45 personas de Gisa y 33.750 euros para otro expediente que afecta a 35 personas en la Agencia Catalana de Cooperación al Desarrollo (ACCD).
Vilardell es una compañía controlada por Albert Vilardell, ex presidente de la Cámara de Comercio de Terrassa (su hija, que también figura como apoderada de la empresa, es la actual tesorera de la Cámara) y ex miembro del consejo de administración de Caixa Terrassa.
Otra de las empresas es Gestaudit, firma propiedad de Carlos Viñuales, un administrador y auditor concursal de Barcelona, que cobró 26.000 euros por un estudio económico y de relaciones laborales para aportar al expediente de Gisa.
La Agencia Catalana del Agua, sin embargo, contrató directamente a la firma Deloitte, sin pasar por concurso público, a la que pagó 42.000 euros para auditar esta entidad. Deloitte es la compañía que se hizo con las auditorías que Mas encargó del Gobierno Tripartito poco antes de contratar al gurú del presidente catalán, David Madí, como director en el área de consultoría estratégica.
En la actualidad, el Instituto Catalán del Suelo (Incasol) ha abierto también un concurso de 130.000 euros más IVA para el “asesoramiento jurídico-laboral con motivo de la reestructuración organizativa que se ha de llevar a cabo”. En otras palabras, para elaborar los criterios del expediente de regulación de empleo. Curiosamente, los criterios técnicos conformarán el 80% de la adjudicación, mientras que los económicos representarán sólo el 20% de la misma.
dilluns, 5 de desembre del 2011
Artur Mas ‘coloca’ a su esposa en la Fira de Barcelona y se ‘carga’ a Judith Mascó
@Antonio Fernández. Barcelona 28/10/2011 (06:00h)
Ser esposa del presidente de la Generalitat tiene sus ventajas. Por ejemplo, que a una la puedan nombrar presidenta de un salón de la Fira. Eso es lo que le ha pasado a Helena Rakosnik, casada con Artur Mas desde 1982. Este miércoles, fue designada presidenta del Festival de la Infancia, que abrirá sus puertas del 27 de diciembre al 4 de enero. La perjudicada ha sido la actriz, modelo y empresaria Judith Mascó, que había ejercido el cargo (“con gran dedicación”, apostillan desde la Fira) durante las últimas siete ediciones. Es decir, desde que CiU fue desalojada de la plaza de Sant Jaume en las autonómicas.
El nombramiento lo realiza el consejo de administración de la Fira de Barcelona, que preside Josep Lluís Bonet. El consejo general, sin embargo, está en manos del alcalde de Barcelona, Xavier Trias y tiene como vicepresidente primero al consejero de Empresa y Ocupación, Francesc Xavier Mena, y como vicepresidente segundo al presidente de la Cámara de Comercio, Miquel Valls. Una cúpula, pues, eminentemente política... y casi monocolor.
En principio, no habría de tener nada extraño la elección de Helena Rakosnik como responsable política del Festival. A lo largo de su vida fue maestra en diversos centros educativos y es empleada de la empresa pública Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB). Su cometido es organizar tours privados del Bus Turístico, el Tranvía Blau y el Teleférico de Montjuïc para colegios, empresas o grandes grupos. Y compagina su trabajo con algunas otras actividades, como la vicepresidencia del Banco de Alimentos de Manresa o de la Fundación Rosa Oriol. También es patrona de la Fundación Instituto de Trastornos Alimentarios y de la Fundación Orquestra Simfònica del Vallès.
Pero nombrar a un familiar tan directo del ‘president’ para un cargo de tanta vistosidad desalojando a una profesional que lo había desempeñado con “gran dedicación” durante siete años huele a maniobra puramente política, y así se comenta en círculos empresariales, sociales y políticos.
En realidad, no es la primera vez que la elección de familiares para cargos de responsabilidad levanta ácidas críticas. No está lejos el pequeño escándalo que se formó tras la vuelta de CiU a la Generalitat y saberse que tres esposas de altos dirigentes convergentes encontraron inmediatamente un puesto de trabajo con cargo a las arcas públicas: Assumpta Farran, esposa del diputado en el Congreso Pere Macias, designada directora general de Calidad Ambiental; Meritxell Lluís, esposa del diputado Josep Rull, nombrada asesora en materia de relaciones con las entidades locales; y Núria Burguera, esposa de Enric Ticó (presidente de Ferrocarriles de la Generalitat), designada directora de comunicación del Puerto de Barcelona. Y a ellos se les añade Oriol Puig, hermano del consejero de Interior, Felip Puig, que fue nombrado director del Servicio Meteorológico de Cataluña. O sea, que el caso de Helena es un suma y sigue.
Hay, sin embargo, un dato curioso: durante la etapa de Jordi Pujol como ‘president’, la cabeza visible de este Festival era su propia esposa, Marta Ferrusola, que sólo lo dejó cuando su partido fue desalojado de la Generalitat. Los paralelismos de Mas con Pujol, pues, son inevitables. Y ponen de actualidad la dura disciplina impuesta durante la última década al líder convergente para convertirlo en un auténtico líder.
Sagas familiares en la Generalitat
Pero los paralelismos van más allá. Pujol también tuvo a otros familiares cerca de él en la Administración. Antoni Subirà, primo político, fue consejero de Industria, mientras que Joaquim Pujol i Figa, primo carnal, fue secretario general de Presidencia. Y luego, tuvo a un jovencísimo Oriol Pujol escalando puestos en el Gobierno hasta ser secretario de Industria. Artur Mas no tiene aún tantos familiares en la Administración.
Pero los restantes hijos de Pujol sí dieron que hablar y hubo interminables polémicas tanto por oscuros informes encargados a las empresas en que participaban como por la larga mano que se adivinaba detrás de algunas decisiones gubernamentales. Artur Mas tampoco tiene a tantos familiares en la sombra, pero su cuñado sí ya ha sido pasto de polémica.
En abril de 2002, Juan Antonio Rakosnik, hermano de Helena, había sido nombrado coordinador de los sistemas de informática del Departamento de Agricultura, cargo del que fue desalojado con la llegada del ‘tripartito’, porque, entre otras cosas, ya había un responsable informático que era funcionario. En realidad, Rakosnik dependía de una empresa ajena que se había hecho con el servicio y era coordinador informático del Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CTTI), organismo de la Generalitat, en la que su cuñado ocupaba entonces el puesto de conseller primer. En el organigrama de empresas públicas, el cargo de coordinador estaba entonces remunerado con alrededor de 100.000 euros anuales. De hecho, en su actual currículum mantiene su cargo histórico de “Coordinador Agricultura en Centre de Telecomunicacions i Tecnologies de la Informació”.
Pero el mal sabor de boca se le ha pasado ya, puesto que con la vuelta de su cuñado, esta vez como ‘president’, se le ha encontrado un nuevo acomodo: Responsable de Calidad de Servicio en la Consejería de Territorio y Sostenibilidad. Eso es lo que pone su actual currículum, incluso en un sitio tan público como Linkedin. Esta ocupación, sin embargo, le viene porque para realizar esta labor de supervisión la Consejería contrató a la empresa de la que forma parte Rakosnik, Microsistemas SA. Los rumores de nepotismo, pues, ya han comenzado a correr como la electricidad en algunos círculos políticos.