Puig quiere endurecer el Código Penal "para que haya más miedo al sistema"
El conseller de Interior catalán defiende el uso de gases lacrimógenos en la huelga del 29-M porque "los violentos" eran muchos más
En la huelga general del 29-M se vieron en Barcelona escenas de auténtica batalla campal, en las que la Policía se vio sobrepasada por los manifestantes. Desde un lado, se habla de "represión policial", uso desproporcionado de gases lacrimógenos y balas de goma, que han dejado tuerto a un joven que no participaba en actos violentos. Por la otra parte, se habla de 'kale borroka' y aplicar Ley Antiterrorista contra quienes "campan a sus anchas con absoluta impunidad".
En mitad de esta ola de reacciones, el consejero de Interior de Catalunya, Felip Puig, ha defendido abiertamente el uso de gases lacrimógenos contra los manifestantes porque "en lugar de 300, los habituales, había 2.000 ó 3.000 violentos".
En una entrevista de TV3, Puig ha aseverado que los manifestantes que se enfrentaban a la Policía "eran más y más violentos y teníamos que hacer algo para que esto no fuera a más". Según sostiene, junto a las 80.000 personas que se manifestaron pacíficamente, hubo 2.000, 3.000 ó 4.000 que se hicieron "cómplices, ayudaron y se adhirieron" al enfrentamiento contra las fuerzas del orden de la Generalitat. De esta forma, fue la masividad lo que les llevó a usar estos métodos policiales en la calle, que en algunos casos no se habían usado nunca.
"A veces se producen incidentes en los que pagan justos por pecadores"
Puig ha defendido la actuación y ha asegurado que el operativo policial funcionó correctamente: "No falló nada", aunque ha admitido que en algunos momentos hubo problemas de contención.
Respecto a las personas que fueron agredidas sin estar participando en hechos violentos, Puig se ha justificado diciendo que "a veces se producen incidentes en los que pagan justos por pecadores, por eso insistimos en que los pacíficos se alejen, porque muchos se quedaron mirando".
El conseller ha abogado por una reforma del Código Penal que endurezca las penas para delitos de violencia callejera "no para que entre más gente en prisión sino para que haya más gente que tenga más miedo al sistema y que no sea tan osada". Así, ha indicado que hay que reflexionar sobre si ciertos delitos sobre los que los jueces no tenían la capacidad de decretar prisión provisional, ahora sí lo permitan, lo que "puede ser una medida disuasoria".
Además, ha lamentado que se haya sido "demasiado permisivo en los últimos años con el vandalismo", por eso ahora esta es una de las medidas que están valorando en sintonía con el Ministerio del Interior.
Por primera vez, no había ocurrido nunca en los últimos tiempos, con 79 detenidos ocho han ido a prisión, cuatro han pagado la fianza y cuatro en prisión: "Buena coordinación con la Fiscalía, atestados de la policía y el juez, que ha tomado la decisión con independencia"